En menos de 24 horas el régimen Ortega Murillo, a través del Consejo Supremo Electoral, ha despojado a dos partidos políticos de sus personerías jurídicas, lo que les inhibe de participar en las próximas elecciones generales del 7 de noviembre. El PRD era el vehículo electoral de la Coalición Nacional, mientras el PC había decidido no participar de los comicios por considerar que no hay condiciones para un proceso libre.