El régimen de Daniel Ortega utiliza desde 2018 una herramienta tecnológica de espionaje de origen ruso llamado: Sistema para Actividades de Investigación Operativa, escrito como SORM, en sus siglas en ruso. De acuerdo con un informe de los investigadores estadounidenses Douglas Farah y Marianne Richardson, el acceso a esa tecnología ha sido parte de las operaciones de una red de grupos y personas “con profundos vínculos” con la inteligencia rusa y la antigua policía secreta soviética KGB, “especializada en criptología y actividad cibernética”. Esta herramienta es utilizada por Rusia y otras naciones exsoviéticas “para vigilancia de teléfonos e internet, y permite a los operadores monitorear transacciones de tarjetas de crédito, correo electrónico, llamadas telefónicas, mensajes de texto, redes sociales, redes Wi-Fi y publicaciones en foros”, según información del Gobierno de Estados Unidos, facilitada por el investigador Douglas Farah a CONFIDENCIAL. La información interceptada y almacenada permite elaborar un “retrato de internet” de los ciudadanos espiados. Sin embargo, el análisis de organizaciones y reportes periodísticos sobre esta herramienta no indican que el sistema tenga la capacidad de vulnerar las aplicaciones de mensajería instantánea, con cifrado de extremo a extremo, como WhatsApp y Signal. En un video en YouTube del blog Bacanalnica, el especialista en seguridad y marketing digital, Manuel Díaz, comentó que, posiblemente, “Nicaragua tiene tecnología rusa que les permite asimilar un poco más fácil la información que reciben de los proveedores” de internet, ya que “no es necesariamente algo que ellos solos pueden hacer”.