Martha Candelaria Rivas Hernández, supuesta víctima del sacerdote Manuel García Rodríguez, párroco de la Iglesia Jesús de Nazareno, en Nandaime, se retractó en los tribunales de Granada al afirmar que “no se siente agredida” por el religioso, que fue un accidente, y que por esa razón no firmó la denuncia.