Lejos de algún avance positivo, el régimen en Nicaragua se profundiza en el abismo y el deterioro de los derechos humanos sigue en una espiral que parece no tener fin. Así se desprende de la actualización del informe del grupo de expertos de Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos hecho público hoy en Ginebra donde se ratifica que el régimen de Ortega y Murillo lleva cometiendo crímenes de lesa humanidad desde abril de 2018 con una, dice el informe, total impunidad.